Mi niño con TDAH habla demasiado
Mi hijo con TDAH habla sin parar, y no parece darse cuenta de que es molesto para otras personas. ¿Cómo puedo ayudarlo a aprender a detenerse antes de que llegue a ese punto?
A muchos niños
con TDAH les gusta hablar, especialmente si les apasiona algo. Eso no siempre
es malo. Pero cuando hablan en exceso o dicen cosas en el momento equivocado,
comprensiblemente pueden molestar a los demás.
El hablar
excesivamente puede tomar muchas formas. Los niños pueden hablar en un momento
inapropiado, hablar fuera de turno, hablar sobre las personas o monopolizar la
conversación. También pueden ofender o molestar a otros diciendo lo primero que
les viene a la cabeza.
Lo primero que
debe saber es que su hijo no está haciendo esto a propósito. De hecho, es
posible que ni siquiera se dé cuenta de que está sucediendo. Eso se debe a que
sus acciones probablemente sean el resultado de sus síntomas de TDAH.
La falta de
autocontrol puede hacer que sea difícil para él detenerse y pensar antes de
hablar, por ejemplo. (Si está sobreexcitado, las palabras pueden derramarse
todas a la vez.) También podría estar demasiado distraído para hacer una pausa
y escuchar a los demás. Y podría estar preocupado de que olvide lo que quiere
decir si no lo dice de inmediato.
No importa cuál
sea el motivo, quiere que su hijo tenga más control sobre su conversación. Aquí
hay algunas formas en que puede ayudarlo a trabajar en averiguar cuándo dejar
de hablar:
Practica
tener conversaciones
Explique a su
hijo que la parte más importante de hablar con los demás es escuchar. Luego,
practique conversaciones para desarrollar esta habilidad. Ayúdelo a
concentrarse en escuchar haciéndole preguntas sobre lo que se dice.
Haga
que silenciosamente repita lo que está escuchando
Esto
puede ayudar a mantenerlo enfocado en lo que otras personas están diciendo.
También podría ayudarlo a desviar la atención de los pensamientos en su cabeza
que quieren derramarse.
Anímelo
a escribirlo
A
veces los niños hablan demasiado en clase. Si su hijo tiene ese problema, puede
ser una buena idea que tome notas cortas para recordarse a sí mismo lo que
quiere agregar a la discusión. Tener notas puede ayudarlo a mantenerse
enfocado. También puede ayudar si otro estudiante menciona la misma idea
primero. En ese caso, su hijo puede reemplazar esa nota por otra y agregar una
idea diferente a la conversación.
Enséñele a "pararse, mirar y escuchar"
Muéstrele cómo
detenerse cada pocos minutos y observe cómo reacciona su compañero de
conversación ¿Ella aparece o
suena molesta? Puede practicar sintonizar su propio tono de voz y pensar
si habla más rápido o más fuerte que la otra persona.
Desarrolle un "código secreto"
Las señales
secretas pueden ser una buena manera de hacerle saber que está saliendo del
tema. Por ejemplo, tocar la barbilla puede ser una forma sutil de hacerle saber
a su hijo si está acaparando una conversación.
Ayude
a su hijo a reconocer el problema
Practique cosas
que pueda decir si se da cuenta de que está hablando demasiado. Un ejemplo es:
"Te interrumpí. Lo siento por eso. ¡A veces me preocupa olvidarme de lo
que quiero decir! "Puede seguirlo diciendo:" ¿Qué estabas a punto de
decir? "
Sea paciente. Se
requiere tiempo, esfuerzo y mucha práctica para que los niños adquieran el
hábito de usar este tipo de estrategias.
Elogie a su hijo. Señale cuando tiene una conversación que se desarrolla sin problemas. Cuanto más específico sea con sus elogios, más probabilidades tendrá de repetir esos comportamientos positivos. También es posible que desee explorar estrategias específicas por edad para ayudar a adaptarse, interactuar con los niños y manejar el TDAH.
Elogie a su hijo. Señale cuando tiene una conversación que se desarrolla sin problemas. Cuanto más específico sea con sus elogios, más probabilidades tendrá de repetir esos comportamientos positivos. También es posible que desee explorar estrategias específicas por edad para ayudar a adaptarse, interactuar con los niños y manejar el TDAH.
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